12 de enero de 2017
Francisco, enojado, aclaró: "Las audiencias son gratuitas"
El Sumo Pontífice denunció a quienes cobran para dejar ingresar a las personas a los encuentros públicos de los miércoles. "En los billetes está escrito en seis idiomas que es del todo gratis", remarcó. "Si alguno les dice que hay que pagar, los están estafando, estén atentos", insistió, y tildó a estás personas de "delincuentes".
El papa Francisco criticó a los "delincuentes" que quieren cobrar por las entradas para las audiencias generales de los miércoles y reafirmó que el encuentro semanal "es gratuito".
"Voy a decir algo que no quisiera decir. En los billetes de las audiencias está escrito en seis idiomas que es del todo gratuito. Para entrar en la audiencia, sea en el Aula o en la Plaza, no se debe pagar, es una visita gratuita que se hace para hablar con el Papa, el obispo de Roma", agregó el pontífice argentino visiblemente molesto en el encuentro de hoy, que por las bajas temperaturas se hizo, como todo enero, en el Aula Paulo VI del Vaticano.
"Supe que hay astutos que hacen pagar el billete. Si alguno les dice que para ir a la audiencia se necesita pagar, los están estafando, estén atentos. Esto es gratuito. Aquí se viene sin pagar porque esta es casa de todos. Quien hace pagar es un delincuente", agregó Francisco.
El Papa brinda audiencias generales todos los miércoles del año en la Plaza San Pedro, que durante la época de invierno (enero) y de verano (agosto) se hacen bajo techo en el Aula Paulo VI o Sala Nervi. Durante julio se suspenden las audiencias, como casi toda la actividad papal.
En tanto, en su homilía de hoy en el marco de la audiencia general, Jorge Bergoglio afirmó que "el hombre, al buscar seguridades tangibles y concretas, cae en la tentación de las consolaciones efímeras, como dinero, alianza con los potentes, mundanidad, falsas ideologías, que parecen colmar el vacío de soledad y mitigan el cansancio de creer"-
"El hombre experimenta la fragilidad de la confianza y siente la necesidad de certezas diversas, de seguridades tangibles, concretas", agregó el sumo pontífice. "No compremos falsas esperanzas", pidió Francisco durante el encuentro con los fieles en el Aula Paulo VI del Vaticano al recordar la película de Vittorio de Sica "Milagro en Milán".
En ese marco y tras afirmar que las escrituras recuerdan "la realidad efímera de estos ídolos", el Papa aseguró que "las ideologías, con su pretensión de absoluto, las riquezas, el poder y el éxito, con su ilusión de eternidad y de omnipotencia, valores como la belleza física y la salud, cuando se vuelven ídolos a los que sacrificar todo, son realidades que confunden la mente y el corazón, y en vez de favorecer la vida conducen a la muerte".
"El salmo 115 describe de modo sugestivo la realidad absolutamente fugaz de estos ídolos. Advierte que quien pone la esperanza en ellos termina siendo como ellos: imágenes vacías con manos que no tocan, pies que no caminan, boca que no puede hablar", recordó.