El hombre de la línea 88 aceleró, se cruzó delante de un Ford Fiesta que circulaba con dos mujeres por el barrio de Flores y tras a una discusión de tránsito, se incrustó en la parte trasera del rodado más pequeño. El acusado pateó a una de las chicas que se acercó a reclamar y la otra, le rompió el parabrisas de una piña.

La víctima quedó tendida en el suelo, sin aire, con el dibujo de la suela de la zapatilla marcado en su remera y con lesiones en los brazos tras caer de espaldas. El chofer cerró las puertas del vehículo público y empezó a hacer gestos agarrándose los genitales.

La acompañante de la conductora del auto, Siomara Avila Calderón de 26 años, denunció a Crónica que el hombre intentó victimizarse diciendo que "recibió una trompada en su nariz y que las acusó de tener un arma blanca". Sin embargo, efectivos revisaron a las mujeres y al rodado y no encontraron nada. 

El episodio se desató este martes por la noche cuando el colectivero quiso adelantarse y cruzó por delante de las mujeres en la Avenida Rivadavia al 5900. Una de ellas, le gritó que "mirá por los espejos". El hombre respondió con insultos y las jóvenes reconocieron reaccionar de igual manera. 

Las denunciantes relataron que decidieron dejar atrás la imprudencia del conductor pero el hombre insistió, les "tiró encima" el vehículo público y se incrustó en la parte trasera del auto. La propietaria del más pequeño rodado, Aixa Lotitto de 25 años, fue hasta la puerta del colectivo y el chofer la sorprendió con una patada en el pecho desde arriba del mismo. 

Los tres protagonistas del suceso quedaron demorados en la Comisaría N12.