Con un año y medio de gobierno y a pocos meses del reencuentro de Cambiemos con las urnas, el presidente de la Nación, Mauricio Macri, brindó una entrevista al periodista decano de la Casa Rosada, Roberto Di Sandro, donde en un balance de gestión aseguró estar "contento con lo logrado aunque falta mucho" y ratificó que "el camino para resolver los problemas de la Argentina es el diálogo". En ese marco, reveló: "Yo no creo en la grieta".

Durante el encuentro con Crónica, el jefe de Estado respondió al cuestionario de Di Sandro, que abordó los principales temas que hoy preocupan a los argentinos, como la inflación, el empleo y los piquetes. Para cada punto, el Presidente hizo eje en "el diálogo" como "la forma que eligió la sociedad para resolver los problemas y que nos diferencia del gobierno anterior".

"Yo no creo en la grieta -enfatizó-. La gran diferencia de mi gobierno con el anterior es que nosotros creemos profundamente en la potencialidad del diálogo".

A nivel de la perspectiva económica, "usted dice que está contento, pero hay gente que no está muy contenta", inquirió el columnista de diario Crónica, a lo que el mandatario contestó con firmeza: "Esta es la dirección correcta, la de generar trabajo para combatir la pobreza, la de la inversión y la confianza".

Profundizando, Macri sostuvo que en los últimos meses "hay gente que percibe una Argentina que ha comenzado lentamente a crecer", al tiempo que reconoció que "hay otra que no".

Sobre uno de los temas más trascendentes de la economía, el jefe de Estado aseguró que "la inflación viene bajando y hay que seguir bajándola hasta que sea de un dígito".

Mercado laboral

Consultado por los despidos, Macri afirmó que "hace siete meses que en el país se generan empleos formales por encima de los que se pierden". Hay sectores "que pueden estar expulsando empleo pero hay otros que agregan", diferenció.

En ese momento, Di Sandro preguntó por los sucesivos piquetes. Macri explicó: "Ese método fue la necesidad de expresar una crisis, una falta de diálogo. Pero ya no es el camino. Yo expreso lo que decidió la sociedad, no al revés. Acá salimos trabajando en equipo, escuchándonos y dialogando. Entendiendo que nada se soluciona de un día para el otro".

Entonces el Presidente agradeció "el enorme apoyo de la gente en todo momento". Por ejemplo, "lo que pasó el 1º de abril fue una expresión de rebeldía de un pueblo maduro que quiere vivir en democracia. Cuando yo voy al mundo y los represento, digo que esta etapa es distinta".

Paritaria docente

"Sin educación pública y de calidad no hay futuro y hace más de diez años que viene decayendo", lamentó Macri, y agregó: "Queremos tener una mesa de diálogo con los docentes. Pero el tema de los salarios lo decide cada gobernador, porque ellos son los que pagan. Como presidente, mi intención es que a través del Ministerio de Educación se genere una mesa de debate”.

En tanto, llamó a los dirigentes sindicales a “hacer autocrítica y pensar qué se hizo mal y aceptar que tenemos un problema grave. El 70 por ciento de los chicos no comprende un problema de matemática, es decir que el 70 por ciento de los chicos que terminan el colegio no va a poder conseguir un trabajo”. Y agregó: “Creo en la buena intencionalidad de la mayoría de los docentes argentinos, pero hay gremios que no representan esa actitud”, indicó.

En un plano más amplio, el primer mandatario resaltó que “el Estado debe ser más eficiente, es de la gente y tiene que estar al servicio de la gente. Para eso hace falta transparencia, porque de la mano de la corrupción, muchos que administraron el Estado se hicieron ricos estafando a los ciudadanos”.

Al llegar al cierre del encuentro en Casa Rosada, Macri hizo un balance e indicó que “han sido (casi) dieciséis meses muy intensos, claramente falta mucho, pero lo importante es que cada día vamos a estar mejor”.

Finalmente, Di Sandro agradeció al mandatario por convertirse en el número 27 que le concede una nota en la Casa de Gobierno. Por su parte, Macri celebró la invitación y concluyó: “Lo único importante para mi gobierno es reducir la pobreza. Que Dios me ilumine para ayudar a la mayor cantidad de argentinos posible”.

La “bronca” que sorprendió al Presidente

“Lo que pasó me dio mucha bronca. Nos distrajimos y no hay que hacer eso, porque se paga. Eso demuestra lo importante de apostar al equipo, de estar todo el tiempo concentrados, enfocados en la tarea. Es lo mismo que hay que hacer para que la Argentina salga adelante, que es trabajar todos juntos”.

La reflexión del Presidente no refiere a ninguna declaración opositora ni a un drama social: apunta directamente a su otra gran pasión: Boca Juniors, que en la noche del domingo perdió la chance de seguir estirando su diferencia en la punta del torneo, cuando Patronato le empató en el último minuto del partido.

“Me dio bronca porque encima era un partido controlado, que tendríamos que haberlo definido. El fútbol es cada vez más caprichoso. Por eso hay que apostar al equipo”, analizó Macri el dramático final del partido.

Con esas palabras, el mandatario demostró una vez más que sigue cada paso del equipo que hoy comanda Guillermo Barros Schelotto, que pese al traspié en la Bombonera sigue puntero con una considerable diferencia sobre sus perseguidores. Días atrás, en el programa “Así es Boca”, Macri había considerado que “dirigir al club es más difícil que ser presidente de todos los argentinos”.