Poco le importó a Luis Suárez que la ausencia de Lionel Messi por la dura suspensión que le impuso la FIFA beneficie a Uruguay directamente, ya que La Pulga no podrá estar en el estadio Centenario. Lucho, primero, se acordó de su amistad con el crack, de la dura sanción del organismo que él mismo sufrió durante Brasil 2014, y bancó a Messi.

"Es increíble que por un insulto te vengan a sancionar con cuatro partidos, pero a partir de ahora van a tener que mirar a todos con lupa para analizar las sanciones", dijo Suárez, que había sufrido una suspensión de 9 partidos con Uruguay y de 4 meses para practicar fútbol, por una "mordida" al italiano Giorgio Chiellini. 

Después, Suárez, se metió de lleno en su Selección, la cual quedó tercera y fue superada por Colombia, ya que perdió ambos partidos de esta jornada: cayó 1-4 ante Brasil en el Centenario y 1-2 ante Perú, en Lima. "Es la tercera derrota consecutiva y la tercera vez que nos dan vuelta el resultado. Por eso hay que ser autocríticos y evaluar muchas cosas porque los puntos de margen que teníamos, ya no los tenemos", admitió.

Luego, siguió: "Se vienen dos partidos clave como Argentina en casa y Paraguay de visita. Esos encuentros pueden llegar a marcar el camino".

En cuanto a los 90 minutos disputados en Lima, en lo que fue derrota por 2-1 contra Perú, Lucho advirtió que "en el segundo tiempo nos faltó animarnos a jugar a más" y que "nos faltó tener más la pelota"

Por último, analizó el polémico fallo del chileno Julio Bascuñán, quien le anuló un gol legítimo a Uruguay y además expulsó a Urretaviscaya, protagonista de la jugada: "Según lo que nos habían contado, la mano que no es intencional no es tarjeta, pero son cosas que pasan. Lamentablemente le pasó a él, justo la noche que debutaba".

Por esta "mordida" a Giorgio Chiellini, en el Mundial de Brasil 2014, Suárez fue sancionado con 9 fechas y cuatro meses de suspensión.