Por Matías Resano
@matiresano
Enviado especial a Mar del Plata

Uno de los tantos atractivos de la ciudad de Mar del Plata es su vida nocturna, que cuenta con una enorme diversidad de propuestas, para que tanto turistas como vecinos disfruten de la velada.

Ese fue el caso de una joven travesti, que acudió a una reconocida discoteca de La Feliz, pero el personal de seguridad le exigió el pago de la entrada de hombres, a pesar de que su DNI confirma su identidad femenina. Por si fuera poco, al día siguiente en otro local bailable también le prohibieron el acceso, aún con ticket en mano, es decir por simple discriminación.

En compañía de una amiga, Magalí Vidal tenía ganas de disfrutar la llegada del fin de semana en el local bailable Bookan, situado en San Martín al 3500, de Mar del Plata.

El lugar promocionaba la entrada gratuita a mujeres, y entonces Magalí formó la fila para acceder a la discoteca. Pero en ese momento, un personal de seguridad del lugar les impidió el ingreso a la joven transexual y a su grupo de amigos, expresando, que "ella paga o se van todos".

Lógicamente, la intención fue exigirle el pago de la entrada correspondiente a los hombres, no teniendo en cuenta que en su DNI es reconocida como mujer.

Al respecto, Agustina Ponce, representante de la Asociación Mundo Igualitario (AMI), expresó, ante Crónica, que no es la primera vez que ocurre una escena discriminatoria en el mencionado boliche, puesto que "hay una denuncia, porque tiene accesos diferenciados, con carteles que expresan: ‘entrada para mujeres sin cargo’, ‘entrada para varones’ y ‘entrada para travestis’".

A pesar de semejante disgusto, Magalí recobró fuerzas y decidió no darle importancia a la actitud del patovica, por lo tanto se dirigió a la noche siguiente a otro recinto bailable, en esta ocasión Sobremonte.

Pero allí, cuenta Ponce, "las mandaban de una puerta a la otra, entonces para evitar inconvenientes compraron el ticket de acceso. Sin embargo, el tipo de seguridad les dijo que no podían pasar. ¿Motivos? Ustedes tienen la entrada prohibida a este lugar", dijo. Además agregó que iban a sancionar al chico que les vendió la entrada.

En consecuencia, desde AMI radicaron las denuncias correspondientes en el área Derechos Humanos del Municipio de General Pueyrredón, y en Inadi.

Al respecto, la especialista en cuestiones de género, reveló que "lo que se presupone en estos casos, porque no hay una ley de discriminación que prevea estas cuestiones, es llamar a las partes y que pidan disculpas los dueños del lugar. Pero ellos niegan esa situación, desconociendo la discriminación y todo queda en la nada".

Ante esto, desde la mencionada entidad se planifica "la idea de seguir realizando escraches en estos lugares para decirles basta a estas actitudes discriminatorias. Los dueños de los boliches son responsables de lo que allí sucede y no es posible que el personal de seguridad que está a su cargo eche a la gente por una simple cuestión de género y haciéndole pasar un papelón delante de todo el mundo".

En Mar del Plata este tipo de situaciones se han incrementado en los últimos tiempos, como sucedió con otra chica trans que no pudo ser atendida en el Hospital Interzonal de Agudos por su condición sexual.

Por ahora parece que nadie hace nada frente a este tipo de situaciones. Es de esperar que las autoridades recapaciten y tomen las medidas que hayan que tomar para evitar situaciones similares.