Reina la preocupación en el estado brasileño de Minas Gerais dado que se han registrado 133 casos sospechosos y 50 muertes.

Letanía, Caratinga, Minas Imbé y Caratinga Piedade son las ciudades en situación más crítica.

El brote de fiebre amarilla hizo que el gobierno del estado anuncie la inversión de 26 millones de pesos para acciones contra la enfermedad en las regiones de Coronel Fabriciano, en el Valle del Acero, Governador Valadares y Manhumirim en el Estado de Oriente y Teófilo Otoni, en el Valle del Mucuri, donde se concentran los casos.

Según el gobernador Fernando Pimentel, la lucha contra la enfermedad es la primera prioridad del estado.

Para facilitar la lucha contra la enfermedad en el estado, se promulgó de emergencia  en la salud pública a 152 ciudades que se encuentran en la zona afectada.