La comisaría de Mártires, municipio de Misiones, inició una investigación a partir de la denuncia pública que realizó Teresa Correa, de 54 años, quien grabó un desesperado pedido de auxilio ante la violencia de género que sufre a manos de su concubino.

Las autoridades de la Unidad Regional II ordenaron la asistencia a la víctima, luego de la noticia difundida por el portal elterritorio.com.ar. Paralelamente, tomaron testimonio a la pareja y a los hijos mayores de Correa, quien el fin de semana se mudó a la precaria vivienda de una de sus hijas que reside en la misma zona, temerosa de algún tipo de represalia por parte del sujeto.

Correa es madre de diez hijos, de las cuales dos mujeres tendrían problemas mentales. Se trata de Silvia A. D. (21) y Carmen (29), quienes a su vez tienen varios hijos y todos residen bajo el mismo techo en condiciones de hacinamiento.

La crudeza del testimonio de Correa conmovió a muchas personas, mientras despertó admiración por la actitud del trabajador del volante que se comprometió con ella.

Consultada al respecto, hasta la propia jefa de la Comisaría de Mártires reconoció el gesto del remisero que decidió grabar el video.

Sobre los dichos de la víctima, quien mencionó que días atrás la policía no le quiso tomar la denuncia por golpes, la jefa de la comisaría local, oficial principal Eliana Becker, subrayó que “si bien hace tres meses que estoy acá, siempre le insisto al personal para que tomen todas las denuncias. Después se verá qué curso toma cada una, pero la denuncia siempre hay que tomarla. Además, trabajé en la Comisaría de la Mujer (de Oberá) y estoy muy comprometida con el tema de la violencia de género”.

En este sentido, también argumentó que el concubino y los hijos de Correa mencionaron que la mujer padece problemas mentales, por lo que solicitarán que se le realice estudios médicos.

"Necesito ayuda para mis hijos. Tengo un esposo y vivo golpeada. Tengo ocho hijos, una hija con bebés y también lo maltrata y les golpea", comienza diciendo en su relato. "Le mezquina si tienen algo. Si tiene leche, no les da”, detalló Correa.

"Fui así golpeada a la comisaría pero no me dijeron nada. Lo único que quiero es que no me moleste más", cerró la mujer.