Por Fernando Vázquez
[email protected]


Autoridades de la Dirección Departamental de Investigaciones de La Matanza lograron desarticular, con 4 detenciones, a la banda del "Indio", que aparece sindicada como responsable del cinematográfico robo de un millón de pesos cometido en julio pasado, a un camión blindado de Prosegur, estacionado frente a un local de pago de servicios, en la localidad bonaerense de Ciudad Evita.

Un quinto miembro de la organización se encuentra prófugo. El ilícito tuvo enorme repercusión ya que uno de los ladrones se vistió como policía y otros dos malvivientes fingieron ser clientes del comercio.
El cacique

Los voceros de los tribunales de La Matanza revelaron que el jefe de la gavilla, apodado el Indio, de 38 años, fue apresado luego de un procedimiento realizado en una finca situada en Mariano Acosta al 6300, en Virrey del Pino.

A su vez, los otros integrantes del grupo, conocidos como Sergio, de 44 años; Jorge, de 39; y César, de 24, fueron localizados al cabo de operativos concretados en Tonelero al 6400 del mismo distrito, en Cobo al 7300 de Gregorio de Laferrere, en Virrey Cisneros al 3500 de Isidro Casanova; y en 2 allanamientos que se efectuaron en el monoblock Nº 7 de un complejo habitacional de La Tablada, situado en el cruce de la avenida Intendente Esteban Crovara y el Camino de Cintura.

Poco quedó del botín
Trascendió que dichos servidores públicos incautaron 70.000 pesos, 5 teléfonos celulares, arietes de los usados por las instituciones de seguridad para romper puertas y cristales, prendas de vestir utilizadas por los forajidos en el asalto y 2 pistolas 9 milímetros con las numeraciones limadas.

El hecho se registró el 11 de julio pasado en la esquina de José Mario Bevilaqua y El Espinillo, en Ciudad Evita, en el oeste del conurbano provincial. Un subcomisario que se desempeña en el Grupo de Apoyo Departamental (GAD) Morón salió al encuentro de la banda cuando escapaba, extrajo su arma reglamentaria e impartió la voz de alto, por lo que se produjo un breve intercambio de entre cuatro y cinco disparos.

Intervinieron en la causa el fiscal Federico Raúl Pedro Russo, de Gregorio de Laferrere, y el doctor Gustavo Banco, magistrado de Garantías, ambos pertenecientes a La Matanza.