7 de julio de 2025
Un rescatista héroe y una escena espeluznante: cómo fue el operativo en Camp Mystic de Texas

A Scott Ruskan, nadador de la Guardia Costera, se le atribuye el mérito de haber salvado a 165 personas del campamento para chicas tras las mortales inundaciones en Texas
Ruskan y su equipo despegaron en helicóptero hacia las 7 a.m. del viernes, hora central, camino al campamento, cerca de Hunt, Texas. Tardaron casi seis horas en llegar a San Antonio debido a la escasa visibilidad y a las difíciles condiciones meteorológicas. “Fue una experiencia desesperante”, dijo.
Ruskan formaba parte de los más de 1700 socorristas, transeúntes, familiares y otras personas que utilizaron helicópteros y drones, llegaron a caballo y en camionetas, y buscaron desde embarcaciones y carritos de golf a quienes seguían con paradero desconocido mientras las operaciones de búsqueda y rescate entraban en su cuarto día.
Muchas de las historias de rescate de las últimas 48 horas han sido angustiosas. Una mujer de 22 años se salvó tras aferrarse a un árbol durante la noche. Una niña fue encontrada tras flotar a la deriva en un colchón durante horas. Una madre y su hijo de 19 años sobrevivieron aferrándose el uno al otro y a un árbol. Una consejera del Campamento Mystic ayudó a evacuar a sus 14 jóvenes campistas para ponerlas a salvo.Ruskan y su equipo tenían una tarea especialmente ardua.Después de su peligroso viaje desde Corpus Christi, Ruskan y su equipo al fin aterrizaron en Camp Mystic, donde empezaron a trabajar con 12 helicópteros de rescate, incluidos los de la Guardia Nacional del Ejército. Había que evacuar a cerca de 200 personas, en su mayoría campistas y algunas integrantes del personal del campamento. Se establecieron dos zonas principales de aterrizaje: una en un campo de tiro con arco y otra en un campo de fútbol.Ruskan se dio cuenta de que quedarse en el lugar liberaría dos plazas extra en su helicóptero para los evacuados, relató, así que dijo a su unidad: “Me encantaría quedarme, podría ayudar mucho más en tierra”.“Las niñas iban en pijama”, recordó en una entrevista con The New York Times, y señaló que algunas solo llevaban un zapato puesto. Tenían frío y estaban cansadas, muchas de ellas empapadas. Y estaban desesperadas por obtener respuestas sobre sus amigas.
En todo el estado de Texas, al menos 81 personas han muerto a causa de las inundaciones, 28 de ellas menores. Más de 40 siguen desaparecidas, dijeron las autoridades; 10 de ellas son campistas del Campamento Mystic, y una es consejera. Hasta el sábado por la noche, más de 850 personas habían sido rescatadas en las operaciones de búsqueda. Las autoridades tejanas han asegurado a los residentes que seguirán buscando a los desaparecidos hasta encontrar a todas las personas, al tiempo que reconocían que la esperanza de encontrar a más personas con vida disminuía cada hora.
“Seguiremos dedicados al 100 por ciento, buscaremos a cada una de las niñas que estaban en Camp Mystic, así como a cualquier otra persona, y todo el cauce del río para asegurarnos de que van a ser recuperados”, dijo el gobernador de Texas, Greg Abbott, en una conferencia de prensa celebrada el domingo.El viernes, en Camp Mystic, Ruskan trasladaba a las campistas hasta los helicópteros que las pondrían a salvo, a veces llevando a dos niñas en un brazo. Mientras transportaba a algunas evacuadas, aseguraba a las demás que volvería por ellas.
Algunas le preguntaban si podían llevarse peluches. “Por supuesto”, les decía.
