7 de junio de 2025
El punto del año: la magistral definición de Zeballos por el costado de la red que torció el rumbo de la final de Roland Garros

El marplatense se lució con una brillante jugada en el tercer set, que despertó los aplausos en el estadio
Zeballos y Granollers comenzaron el encuentro, que se disputó en el estadio Philippe Chartier, con un contundente 6-0 que alimentaba las ganas de gritar campeón en la tierra batida de París. Sin embargo, Salisbury y Skuspsky reaccionaron en el segundo set y lo ganaron con un ajustado 7-6.
El camino de Granollers y Zeballos hacia esta final en París fue casi impecable, como en el duelo decisivo. Como quintos preclasificados, superaron con autoridad sus primeros encuentros en sets corridos. El primer gran desafío llegó en cuartos de final ante Ivan Dodig y Orlando Luz, a quienes vencieron por 6-2 y 7-6(4), demostrando su solidez en los momentos clave al salvar los tres puntos de quiebre en contra.
En la semi, La conquista del integrante de la Selección Argentina de Tenis YPF de Copa Davis en Roland Garros no es solo un triunfo personal o de pareja; es un logro que eleva el palmarés argentino en los torneos de Grand Slam, una categoría de competencia donde solo los más grandes consiguen dejar su huella.En la rama femenina de singles, la única argentina en alcanzar la gloria máxima fue la inigualable Gabriela Sabatini. “Gaby” se consagró campeona del US Open en 1990, en una actuación magistral que marcó a toda una generación.
Otras grandes tenistas argentinas también dejaron su marca en esta modalidad. Gabriela Sabatini sumó un Grand Slam en dobles, al ganar Wimbledon en 1988 junto a la alemana Steffi Graf. Además, Gisela Dulko se coronó en el Abierto de Australia en 2011 haciendo pareja con la italiana Flavia Pennetta.
Hasta hoy, la categoría de dobles masculinos no contaba con campeones albicelestes. Figuras como Guillermo Vilas llegaron a instancias decisivas, pero el trofeo se había resistido. La victoria de Horacio Zeballos y Marcel Granollers rompe con esa sequía y completa el círculo de triunfos argentinos en todas las modalidades de los Grand Slams. Es un logro que no solo celebra el talento y la perseverancia de Zeballos, sino que también enorgullece a un país que respira tenis.