13 de febrero de 2025
Ozempic podría ayudar al tratamiento del trastorno por consumo de alcohol

Los científicos tienen varias teorías sobre cómo la semaglutida, el ingrediente activo del fármaco, podría reducir la ansiedad vinculada a las conductas adictivas
Los participantes pasaron dos horas en una sala de laboratorio provista de sus bebidas alcohólicas preferidas; una vez antes de empezar a tomar el fármaco y otra después. Los participantes en el estudio también informaron cuánto habían bebido cada día durante nueve semanas.
Las personas que tomaban semaglutida también eran más propensas a declarar menos días de consumo excesivo de alcohol que quienes tomaban el placebo.
Los efectos sobre el consumo de alcohol fueron mayores de lo previsto por los investigadores, dados los datos anteriores sobre otros medicamentos para el trastorno por consumo de alcohol, dijo Christian Hendershot, director de investigación clínica del Instituto de Ciencias de la Adicción de la Universidad del Sur de California y autor principal del estudio.Uno de estos estudios, publicado el mes pasado, examinó los registros de más de dos millones de personas con diabetes que recibieron atención médica del Departamento de Asuntos de los Veteranos de Estados Unidos.
El Y el pasado mes de mayo, un estudio que examinaba una gran base de datos de historiales médicos descubrió que las personas con trastorno por consumo de alcohol y obesidad o diabetes tipo 2 que tomaban semaglutida tenían menos probabilidades de recaer.Pero una de las principales hipótesis es que el fármaco influye en las vías de recompensa del cerebro. Al igual que el medicamento puede hacer que la comida parezca menos apetecible, también puede hacer que el alcohol sea menos tentador.
“Creo que va a convertir a las personas que luchan con su capacidad para controlar la bebida en, potencialmente, personas que pueden controlar su bebida”, dijo Schacht.
Los investigadores han teorizado que ese efecto podría extenderse a toda una serie de conductas adictivas. Eso podría explicar por qué, entre un pequeño subconjunto de personas del estudio que fumaban cigarros, quienes tomaron semaglutida experimentaron un mayor descenso en el número promedio de cigarros que fumaban al día.Los médicos suelen llamar a los medicamentos como el Ozempic “fármacos de por vida”, porque dejan de funcionar si alguien deja de tomarlos. Aún no está claro si una persona con trastorno por consumo de alcohol necesitaría tomar la medicación el resto de su vida, ni qué ocurriría con sus ansias cuando dejara de tomarla.
Y “ningún fármaco funciona para todo el mundo”, señaló Simmons. Estudios más amplios podrían demostrar que algunos pacientes con trastorno por consumo de alcohol responden mejor a la medicación que otros, dijo.“Soy optimista, no me malinterpreten”, dijo Simmons. “Pero todavía no me siento cómodo diciendo que los pacientes deberían buscar estos medicamentos para la adicción”.