26 de diciembre de 2024
Zoë Kravitz y Matt Reeves: lecciones de una colaboración creativa inolvidable
Mientras la artista explora su pasión como directora, el guionista y director reflexiona sobre el arte de reinventar a Batman. Convocados por Variety, cuentan cómo su trabajo en “The Batman” marcó un antes y un después en sus carreras
La conversación revela un profundo respeto mutuo y un enfoque meticuloso hacia la creación cinematográfica. Mientras Reeves reflexiona sobre su proceso para construir mundos narrativos como en The Batman y su próxima secuela, Kravitz detalla el arduo camino que recorrió al pasar de actriz a cineasta.
Kravitz admite que nunca se permitió imaginarse como directora al inicio de su carrera. “Especialmente como mujer, cuando amas el cine, te dicen: ‘Ah, qué lindo, deberías ser actriz’. Nadie te dice: ‘¿Te gustan las películas? Deberías ser directora’”, confiesa.Un instinto que la llevó a proponer ideas durante The Batman, algo que Reeves recuerda con admiración: “Tú dijiste: ‘Oh, eso es muy fácil. Simplemente haz que él mire a los gatos y diga: “Tienes muchos gatos”’. Es uno de mis momentos favoritos de la película”.
“Es algo que realmente amo”, asegura. Según Reeves, el talento narrativo de Kravitz era evidente incluso durante The Batman. “Eras alguien a quien podía decir: ‘Miremos el monitor. Busquemos el momento’. Tenías una comprensión intuitiva de lo que funcionaba”. Ese instinto creativo fue clave para que Kravitz lograra dar el salto a un rol más amplio detrás de las cámaras.
La ópera prima de Kravitz, Blink Twice, sigue a Frida (Naomi Ackie) en su llegada a la isla de un magnate tecnológico, Slater King (Channing Tatum), donde la opulencia oculta un trasfondo siniestro. Desde el casting, Kravitz mostró claridad en su visión.El verdadero reto vino en la sala de edición, un proceso que se extendió casi dos años. “Fui advertida: ves tu montaje y estás lista para… bueno, quería ponerme en la basura”, admite.
Los problemas de tensión narrativa y conexión con los personajes la llevaron a soltar el control. “Me di cuenta de que cuanto más intentas controlar una película y hacerla lo que crees que era, peor será. Es como tener un hijo y decir: ‘Vas a ser heterosexual, médico y vivir en Connecticut’”.Para Reeves, la creación cinematográfica es un proceso que no puede apresurarse. “Es maravilloso, excepto por la velocidad de terminar algo”, admite, comparando el proceso con estar “en una habitación oscura” donde todo está ahí, pero se necesita tiempo para encontrarlo.
Esta meticulosidad fue clave en su carrera, especialmente al abordar a Batman desde una perspectiva personal. “Siempre estás buscando una vida interna que haga que esta historia nos permita ver cuál es la lucha de esta persona”, explica.Este enfoque personal también se extiende a otros proyectos del universo de The Batman, como la serie de HBO The Penguin, protagonizada por Colin Farrell.
Aunque no la dirige, Reeves se siente profundamente conectado al tono y la narrativa que ayudó a moldear. “Me siento realmente afortunado. Estos personajes no me pertenecen; pertenecen al mundo. Todo se reduce a si puedes abordarlos de una manera que exprese algo personal”.La colaboración entre Reeves y Kravitz en The Batman marcó un éxito para ambos y dejó una profunda huella en su visión del cine. La actriz admite que el enfoque meticuloso de Reeves influyó directamente en su evolución como directora:
Para la actriz, la experiencia no solo fue una oportunidad para profundizar en su personaje de Selina Kyle, sino también para absorber lecciones clave sobre narrativa visual: “Lo que más me impresionó fue tu capacidad para encontrar el corazón de cada escena. Trabajas con ideas elevadas, pero las haces sentir humanas y reales”. Ambos destacan la importancia del aprendizaje mutuo, con Reeves describiendo el rodaje como “un proceso constante de descubrimiento” y Kravitz afirmando que esta experiencia le dio la confianza para lanzarse a dirigir su propio proyecto.
Para Kravitz, dirigir su primera película fue un desafío enorme, pero también una confirmación de su pasión por este rol. “Lo amo”, asegura, dejando claro que quiere seguir explorando como cineasta.Reeves, por su parte, continúa expandiendo su visión del universo de The Batman. Actualmente trabaja en el guion de The Batman Parte II, un proceso que describe como “lento pero necesario” para garantizar que todo encaje.
Kravitz elogia la capacidad de Reeves para convertir ideas grandiosas en historias íntimas: “Todas se sienten tan humanas y tan realistas. Y es una cosa muy difícil de hacer”. Con esta admiración mutua y trayectorias creativas distintas, ambos artistas están destinados a seguir dejando su marca en la industria del cine.