6 de agosto de 2024
Kevin Durant se convirtió en el máximo anotador de la historia olímpica de Estados Unidos en la aplastante victoria contra Brasil
El Dream Team se impuso con autoridad por 122 a 87 y avanzó a las semifinales del torneo, donde se medirá con Serbia. Los detalles
“Lo de LeBron, a los 39 años es una auténtica locura. Pero no sólo por su juego. Para mí, él es una de las mejores cosas que me están pasando en estos Juegos. Ver lo que hace. Ver cómo se prepara, cómo le gusta trabajar, cómo le gusta este deporte. Cómo quiere a sus compañeros. Y cómo los motiva”, indicó Kerr, otra de las estrellas de este certamen, ganador de nueve anillos de la NBA, cuatro de ellos como técnico (con los Golden State Warriors: todos con Stephen Curry y dos de ellos con Kevin Durant, asimismo presentes en estos Juegos). “Es obviamente, uno de los más grandes de toda la historia. Pero todo lo suyo va mucho más allá de lo que se ve en la cancha. Es todo el paquete, en su conjunto, lo que va muchísimo más allá de sus ya de por sí increíbles prestaciones”, comentó en rueda de prensa.
A pesar de haber sumado 22 unidades en la victoria ante Brasil, el factor negativo se dio cuando recibió un codazo de un rival que no le permitió continuar con el compromiso. Si bien el duelo ya estaba liquidado con los 30 puntos de diferencia que había logrado sacar el Dream Team, los fanáticos se quedaron con las ganas de ver al experimentado jugador que optó por cuidarse de cara a las semifinales.El combinado de Oceanía se disparó de la mano del base de Miami Heat. Inconmensurable, guió al conjunto aussie a un 20-44 ante una Serbia atolondrada, incapaz de frenar la dinámica y el acierto de su rival, que parecía camino de sentenciar su pase a semifinal por la vía rápida. Pero Jokic y sus compañeros, al más puro estilo clásico del baloncesto balcánico, negaron rendición. Bajo la batuta del pívot fueron paulatinamente desperezándose, encontrándose a sí mismos. Mermaron su desventaja al descanso (42-54) y prolongaron su reacción para encarar el último parcial ya en ventaja (67-65). Era un partido nuevo, en el que el combinado europeo llegaba crecida por su reacción, tampoco consiguió despegarse. Llegó al último minuto con un punto de ventaja, que mantuvo hasta el último instante, pero Mills, incombustible, forzó la prórroga con un tiro pese a la oposición de Jokic. En el tiempo suplementario se resolvió la historia y el choque entre Serbia y Estados Unidos entregará una cita obligatoria en el Paris Bercy.