24 de noviembre de 2017
"En el Norte, el que habla de Corea del Sur va preso"
EXCLUSIVO | En entrevista exclusiva con Crónica TV, un joven ex soldado norcoreano que desertó contó lo que ocurre en el régimen de Kim Jong Un. Contó que la aspiración de los chicos al entrar al colegio a los 7 años es “llegar sanos y fuertes al servicio militar obligatorio, porque sólo allí se puede progresar limitadamente; en la vida civil, por más que se estudie, no sirve para nada”.
En su recorrida por la península coreana, el periodista Santiago Cúneo logró entrevistar a un joven norcoreano que en 2015, con 19 años, desertó del ejército y huyó del país con su madre y una hermana.
Sentado de espaldas a la cámara por razones de seguridad, el joven comentó cómo fue su vida en
Corea del Norte
. “Yo vivía con mi familia en Hezan, una ciudad fronteriza con China que permitía el comercio. Mi padre tenía un negocio y por eso teníamos un pasar mejor que muchos, aunque mayormente enCorea del Norte
la gente es pobre. Y es hereditario, quien nace rico lo será hasta que muera, y quien nace pobre será pobre siempre”, describió.La aspiración de los chicos al entrar al colegio a los 7 años es “llegar sanos y fuertes al servicio militar obligatorio, porque sólo allí se puede progresar limitadamente; en la vida civil, por más que se estudie, no sirve para nada”.
También refirió que él y sus familiares llegaron a
Corea del Sur
luego de tres meses, durante los cuales pasó por China y Vietnam, y gracias a la ayuda de una organización de activistas chinos y norcoreanos.“En Corea del Norte
enseñan que Corea del Sur
es un país pobre, donde la gente muere de hambre. Pero muchos sabemos que no es así, ya que a través de pendrives que ingresan desde China podemos ver en noteTV -un equipo similar a la notebook- informativos y telenovelas surcoreanas donde vemos otra realidad. Sin embargo, cualquiera que comente algo de eso públicamente puede ser encarcelado”, describió el desertor.
Añadió que “no existen supermercados, sólo plazas de mercado; que el único canal permitido a la población es la KCNA -la central de informaciones del gobierno- y la propaganda oficial tanto en ese medio como en las calles y escuelas es que el líder, Kim Jong-un
, está convirtiendo a Corea del Norte
en una potencia militar y nuclear para que ningún otro país, ni siquiera Estados Unidos, pueda atacarlo”.
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POLÍTICA EXTERIOR SURCOREANA
Una verdadera clase de diplomacia oriental
Por Santiago Cúneo
@SantiagoCuneo
En un rincón de Seúl, donde almorzar es un ritual que necesita tres meses de previa reserva, el actual jefe de la política exterior de
Corea del Sur
y ex embajador de ese país en la Argentina, Choo Jong Yoiun, nos introdujo en el mundo ancestral de la paciencia oriental.El diplomático entendió que las pruebas nucleares de
Corea del Norte
le ponen freno al progreso de una unifi cación, pero recordó a su vez que, como cualquier otro lugar del mundo, es un buen lugar para empezar de nuevo el diálogo entre las dos Coreas.Apostando todo al tiempo, el jefe de los asesores diplomáticos del primer ministro surcoreano aclaró que “estamos en guerra, nunca se terminó”.
“El armisticio no es una rendición. Nadie ganó y seguimos en guerra. Necesitamos de todos los factores para llegar a buen puerto”, puntualizó el experto en política internacional.
Posteriormente, nos recordó que “la guerra de Corea es una guerra mundial de alianzas y Estados Unidos tiene metido un pie en Corea y esto difi culta el diálogo, así como también el apoyo de China a la dictadura norcoreana”.
Fue verdaderamente una clase de diplomacia oriental, mientras saboreamos comida típica, picante y desafi ante a nuestro paladar criollo. Durante un rato, Choo Jong Yoiun nos hizo olvidar del tema angustiante de los misiles nucleares de