Hoy hace exactamente 30 años River Plate se convirtió en el quinto equipo argentino en ganar la Copa Intercontinental, cuando en la lejana Tokio dio cuenta de Steaua Bucarest con un gol del uruguayo Antonio Alzamendi.

A las órdenes de Héctor Rodolfo Veira, el "Bambino", River formó con Nery Pumpido; Jorge Gordillo, Nelson Gutiérrez, Oscar Ruggeri y Alejandro Montenegro; Héctor Enrique, Américo Gallego, Roque Alfaro y Norberto Alonso; Antonio Alzamendi y Juan Gilberto Funes.

Pumpido, Ruggeri y Enrique venían de integrar la Selección Argentina que había corona en el Mundial de México. 

A los pocos minutos de iniciado el juego Alonso cobró rápido un tiro libre y habilitó a Alzamendi, que enfrentó al arquero Dumitru Stingaciu y tras un rebote impulsó la pelota a la red con un corto cabezazo.

Después se desarrolló un partido muy trabado, los rumanos llegaron al empate pero el gol no fue convalidado por una posición adelantada que en realidad no había existido, pero en general River controló el juego y se mantuvo a salvo de apremios.

Steaua, que era conocido como el equipo del ejército rumano, había consumado un impactante golpe de escena al vencer a Barcelona en la final de la Copa de Europa en una insólita definición mediante penales.

El partido había terminado 0-0 y en los remates desde los once metros los catalanes fallaron cuatro veces y los rumanos fallaron dos, pero con dos aciertos consumaron la celebración 70 mil espectadores que colmaron el estadio Ramón Sánchez Pizjuán, de Sevilla.

River atravesaba años excepcionales, primero con la conquista del torneo argentino de 1985/86 y después con el logro de su primera Copa Libertadores de América versus el gran América de Cali que entre otros constaba de Julio César Falcioni, Carlos Ischia, Ricardo Gareca y el paraguayo Roberto Cabañas.

Amén de ganar la versión de 1986, River jugó la final de la Copa Intercontinental en 1996 y la perdió 1-0 frente a Juventus de Italia, también en Tokio,en tanto en 2015 cayó 3-0 con el Barcelona de Lionel Messi, pero en este caso por el Mundial de Clubes, en Yokohama.