El delincuente que confesó su participación en el secuestro y asesinato del taxista Alberto Sarubbi, contó ante la Justicia que todo se inició como un hecho "al voleo" en el barrio porteño de Belgrano, mientras que al menos tres vecinos del barrio Villegas de la localidad bonaerense de Ciudad Evita que vieron cómo fue el homicidio contaron que se trató de una "ejecución".

Franco Gonzalo Maldonado (20), el secuestrador que el 17 de noviembre fue apresado cuando fue a cobrar el rescate, no sólo fue primer detenido que tuvo la causa sino también el único que en el marco de un "acuerdo de colaboración", le confesó al fiscal Carlos Stornelli su participación y algunos detalles del hecho.
Según un dictamen de Stornelli, Maldonado contó que el hecho "no fue planeado, fue al voleo".

"Al hombre éste lo agarramos en Cabildo antes de Juramento o un poquito después, en una estación de servicio medio rosada, de la mano izquierda. Era Shell o Axion. Este señor venía de frente y nosotros salíamos de la calle de atrás. Nosotros tres participamos, nadie más", dijo el imputado en referencia a él, a un adolescente de 16 años identificado sólo como B. y a Jonathan Gabriel Yfran, alias "Catarro" (18).

"Subimos al taxi y le dijimos que íbamos hasta Eva Perón y Crovara", señaló el imputado en lo que fue su segunda declaración indagatoria.

"Al taxista lo trajimos de Belgrano hasta Villegas", dijo en referecia a ese barrio de Ciudad Evita y luego agregó: "Llamamos por teléfono, pedimos el rescate. Llamó ’Jony Catarro’. “Él hacia las llamadas. También hablé yo. Al señor lo tenían B. y ’Jony Catarro’".

Maldonado contó que al taxi Fiat Siena "lo manejaba el señor" y que ya le habían dicho que "estaba secuestrado".

"Llegamos a la calle 700, estacionó, bajamos, fuimos a la plaza, tomamos una Seven Up. Fuimos caminando por entremedio de los pasillos. El hombre no decía nada. Decía que su hijo iba a venir. Nunca le pegamos ni nada. Sólo le hablamos y nada más. No fue maltratado", agregó el imputado, quien incluso contó que ante un pedido de la propia víctima, le dieron "un Rivotril que tenía en su mochila".

Sobre el momento del pago del rescate y su detención, dijo: "Hablamos por teléfono. Los hijos dijeron que estaban por Crovara donde les dijimos. B. estaba atrás de un puesto de diarios con el señor. ’Catarro’ estaba conmigo. Crucé Crovara, agarré la plata y me empiezan a tirar. A unos metros me agarran con la plata en la mano".

En tanto, tres vecinos del barrio contaron cómo fue la ejecución presuntamente llevada a cabo por parte del menor B.

"El pibe tenía arrodillado al hombre. Como había un menor cerca, trasladó a su víctima hasta un sitio próximo a un tacho de basura. No pude ver más porque me tapaba un árbol pero escuché los tiros y vi al pibe salir corriendo. Antes de los disparos se escucharon sirenas", dijo uno de los testigos.

"Venían caminando desde la esquina. Cuando finalmente llegó al basural, veo que lo empuja, el señor trastabilla, cae arrodillado y ahí le dispara. El señor no reaccionó, no pidió ayuda, ni se defendió, ni se dio vuelta. El chico no le dijo nada o al menos no lo escuché. Solo lo ejecutó", recordó otro testigo.