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GENTE

29 de julio de 2014

Quedó en coma tras someterse a una cirugía para cambiarse las siliconas

Ocurrió en una clínica de Rosario. La mujer está internada desde hace casi dos semanas tras sufrir un paro cardiorrespiratorio durante la intervención. Los familiares presentaron una denuncia para que se determine si hubo mala praxis

La mujer, de 45 años, tenía previsto cambiarse los implantes mamarios en el Centro de Cirugía Plástica y Estética, ubicado en el bulevar Oroño al 1300, en Rosario, Santa Fe, el pasado 16 de julio.

Según le habían explicado los médicos, se trataba de una intervención de dos horas, con "índices muy bajos de complicaciones". Sin embargo, el procedimiento no siguió el curso esperado: la mujer entró en paro cardiorrespiratorio y está desde hace casi dos semanas en coma, sin respuesta a ningún tipo de estímulo, según informó hoy el diario Clarín.

El cirujano Guillermo Di Biaso, quien dirige la clínica y participó de la operación, señaló que lograron reanimar a la mujer para trasladarla de urgencia a un hospital de la zona, donde desde entonces permanece internada. El establecimiento tiene la habilitación correspondiente y la documentación en regla.

El último parte médico indica que la mujer, que se dedica a la venta de materiales descartables para cirugías médicas, está con pronóstico reservado desde la operación: no puede responder a comandos básicos como abrir y cerrar la mano debido a que se encuentra incapacitada para moverse.

En tanto, sus familiares radicaron una demanda ante la Justicia rosarina para que se determine si se trata de un caso de mala praxis. Según señalaron, la mujer se encontraba en buen estado de salud antes de la intervención, por lo que apuntan que "algo pasó en esa sala".

El cirujano Di Biaso confirmó que la mujer no tenía "ninguna patología" y destacó que los estudios prequirúrgicos habían dado buenos resultados.

"Ya la habíamos operado, la conocíamos. Estamos tratando de encontrar una explicación. Fue un accidente, mala suerte. Estamos consternados ", señaló y añadió: "Se hacen cientos de cirugías por día. Me tocó a mí este desenlace no deseado. Nunca me pasó en 30 años de profesión".

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