13 de mayo de 2025
“Golpe muy duro”: la baja de aranceles genera dudas sobre el futuro del régimen de Tierra del Fuego
Los empresarios que fabrican celulares en la isla saben que la competencia de los productos importados tendrá un fuerte impacto en sus números. La política provincial también se mostró preocupada
En el mismo sentido que el mandatario provincial se refirió la senadora nacional peronista Cristina López. “La eliminación de los aranceles a la importación de teléfonos celulares importados va a provocar en Tierra del Fuego: desempleo, desinversión y un devastador impacto social. La desregulación anunciada por el Gobierno nacional deja a las empresas radicadas en Tierra del Fuego en condiciones muy poco competitivas”, destacó.
El senador radical Pablo Blanco dijo que con la medida Milei firmó “el certificado de defunción de Tierra del Fuego”. Y agregó: “Chau empleo, chau producción nacional. Tierra del Fuego es soberanía, industria y trabajo. No se entrega, se defiende”.En diálogo con Infobae, Dante Sica, exministro de Producción y fundador de la consultora Abeceb, aseguró que sin aranceles “la conveniencia de producir en Tierra del Fuego con todo el costo logístico que implica pasa a ser prácticamente nula” .“Cuando estábamos en el Gobierno, la pregunta era si convenía desarmar el esquema de Tierra del Fuego o simplemente eliminar los aranceles y dejar que se caiga solo. Como vimos, cuando bajábamos impuestos internos, que algunos empresarios se pusieron a ensamblar pantallas en la provincia de Buenos Aires, dentro de poco vamos a ver algo parecido”, destacó a Infobae Dante Sica, exministro de Producción y fundador de la consultora Abeceb.Las principales compañías de electrónica y celulares aseguraron estar analizando la medida y su impacto. “Hay cautela, estamos haciendo cuentas todavía. Hay muchas dudas. Igual, el impacto de la baja va a tardar unos meses en verse en las góndolas, aunque podría haber alguna señales y gestos de parte de algunas marcas”, reconocieron desde una de las grandes empresas del mercado.Otras, más vinculadas a la importación, saludaron el anuncio de Adorni. “La medida es positiva para el negocio, pero sumamente conveniente para el consumidor final, que tendrá más acceso a precios competitivos y alineados con el mercado internacional. La reducción de la presión fiscal es fundamental para el crecimiento”, comentó Ariel Elizalde, de Positivo Argentina, uno de los nuevos jugadores que comenzó a importar productos este año y está activo en el mercado de celulares.
La contracara de este anuncio es que, al mismo tiempo que se comunicó la decisión de bajar del 16% a 0% el arancel a la importación de celulares, también el Gobierno reducirá los impuestos internos a los teléfonos -y a otros productos-, por lo que tendrán los fabricantes una reducción de costos. De todas maneras, y aunque en menor medida, esta baja impositiva también incluirá a los importados. Aún así, y pese a que esta baja de impuestos fue celebrada por los empresarios, en la Asociación de Fábricas Argentinas Terminales de Electrónica (Afarte) se mostraron muy preocupados por la baja de aranceles y remarcaron que “habrá que ver cómo se comporta el mercado con la primera etapa de la reducción”. Vale aclarar que la reducción inmediata será de 8 puntos y los 8 restantes quedarán para mediados de enero.Actualmente, son muy pocos los celulares que se importan legalmente. Sí hay un contrabando creciente y por el cual la industria ya venía advirtiendo. Es más, 1 de cada 3 celulares que se venden en el país provienen del contrabando, según cifras del sector. Y si bien esta reducción de aranceles puede ser un aliciente para que no sea tanto negocio importar vía contrabando, otra posibilidad es que se sumen ambas situaciones y complique aún más a la industria.
En términos de créditos fiscales, se estima que el beneficio en IVA representa USD 630 millones anuales. Su aplicación sobre la facturación total y no sobre el valor agregado se cree que incentiva la importación de insumos en detrimento de la producción local. Otra exención incluida es la de aranceles a la importación, que implica un gasto tributario de USD 436 millones. Los datos surgieron de un informe realizado por el centro de estudios Fundar.
Más allá de la política, la gran mayoría de las empresas del sector aún analizan los anuncios, calculadora en mano. “Nos vamos a adaptar, seguiremos con Tierra del Fuego, o importaremos. Vamos a hacer lo mejor para que nuestros clientes tengan los precios más bajos”, cerraron desde una de las grandes marcas de smartphones. Ninguna quiso hablar en on the record hasta no tener más claras las medidas.
