ACTUALIDAD
23 de julio de 2015
El Padre Rafael Velasco y su trabajo solidario junto a los jóvenes
Es cura en la Parroquia San José, fundada por el Papa Francisco. Bettina Bulgheroni ahonda en su misión pastoral ayudando y guiando a chicos y adolescentes. Sumate a #PuentesdeEsperanza
La comunidad educativa al servicio de la solidaridad. Esa es la misión que el Padre Rafael Velasco lleva adelante desde la Parroquia San José en San Miguel y del Colegio Parroquial. Bettina Bulgheroni lo invitó a contar su historia solidaria en #PuentesdeEsperanza.
Nació en Córdoba y desde hace muchos años que trabaja junto a los jóvenes. Es Padre de la compañía de Jésús y dejó la rectoría en la Universidad Católica de Córdoba para trabajar con quienes más lo necesitan.
"Fue un cambio de mucha alegría, siempre deseé trabajar en un lugar de necesidad grande en dónde generar otro espacio desde la fe. Y esta parroquia la conocía desde hace muchos años, la fundó Jorge Bergoglio", cuenta.
Rafael pone mucho énfasis en la juventud y celebra que cada vez se involucre más con la solidaridad. "Cuando ven una propuesta que les entusiasma y es viable, dan mucho, tienen esa capacidad. A su vez creo que el Papa Francisco les llega mucho y los impulsa por medio de un lenguaje llano".
Cree además que los jóvenes de hoy buscan un futuro yendo a la escuela, a la universidad y acercándose a la iglesia. "Nosotros tenemos un merendero dónde también se brinda apoyo escolar a los chicos los días sábados. Se da catequesis y hay asistencia psicológica. Con su ayuda, lo hacemos entre todos".
Por último, les dejó un mensaje a todos los jóvenes: "Les diría que se pregunten qué van a hacer en su vida. Qué deseo mueve la propia vida, porque son los grandes deseos los que logran que se hagan grandes cosas. Para eso, se necesita que los adultos les mostremos que vale la pena ir tras eso".
Yo ayudo: Copate
Tomás Odriozola y Tomás Kohlmayer son exalumnos del colegio "El Salvador" y llevan adelante Copate (Construyendo Para Todos Esperanza)
"Es un espacio de encuentro formado por un grupo de jóvenes que buscan vivir y compartir la fe mediante la espiritualidad y el servicio a la comunidad".
En su vocación de servicio se definen como "callejeros de la fe", es decir, que reconocen que la fe sin obrar es incompleta.
Generar un vínculo con el prójimo y forman parte de la ONG Un techo para mi hermano.