25 de octubre de 2024
La dictadura cubana admitió que siguen los apagones simultáneos en hasta el 32% de la isla
La estatal Unión Eléctrica prevé una capacidad máxima de generación eléctrica de 2.124 megavatios para una demanda que alcanzará los 3.000 megavatios
El déficit (la diferencia entre oferta y demanda) será de 876 MW y la afectación (lo que se desconecta realmente de forma preventiva) alcanzará los 946 MW en el denominado “horario pico”, en la tarde-noche.
Los apagones se deben principalmente a la carencia de combustible -fruto de la falta de divisas para importarlo- y a las frecuentes averías en las obsoletas centrales termoeléctricas del país, con más de cuatro décadas de explotación y un déficit crónico de inversiones.
Actualmente, 7 de las 20 unidades de producción energética en las 7 centrales termoeléctricas terrestres del país están averiadas o en mantenimiento, según la UNE. Además, 24 centrales de generación distribuida (motores eléctricos) están fuera de servicio por falta de combustible (diesel y fueloil).Los frecuentes cortes en el suministro eléctrico dañan la economía cubana- que en 2023 se contrajo un 1,9%, según datos oficiales- e impulsan el descontento social en una sociedad ya gravemente afectada por una crisis económica desde hace cuatro años.
También han desencadenado protestas antigubernamentales, incluidas las del 11 de julio de 2021 -las mayores en décadas-, las de Nuevitas y La Habana en agosto y septiembre de 2022, y las del pasado 17 de marzo en Santiago de Cuba (este) y otras localidades.